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Gerardo, parte de la Rebelión Radical en Buenos Aires

Más allá de que a través de las Redes Sociales intente mostrarse activo en Jujuy, Gerardo Morales está en Buenos Aires, participando de distintas reuniones con dirigentes del radicalismo en pos de reordenar el rumbo del Partido según los nuevos tiempos.


La “Rebelión Radical” que se tramó durante los últimos días tomó estado público con las declaraciones del gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, quien afirmó que no había que descartar que Macri no sea el candidato. Según pudo saber Política Jujuy, de las discusiones de los últimos días participaron también el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, y los legisladores nacionales Mario Negri y Luis Naidenoff.


La postura de Morales fue ambigua: si bien manifestó que con este rumbo no podían ganarse las elecciones –acompañando su argumentación con mediciones de Jujuy sobre Mauricio Macri-, pidió calma en las declaraciones públicas hasta tanto no pase la elección en la que buscará ser reelecto. Cornejo hizo caso omiso al pedido y lanzó en los Medios declaraciones que sonaron como una bomba en la Casa Rosada.


Los dirigentes radicales barajan distintas opciones: desde que compita en las PASO el capitalino Martín Lousteau -idea que impulsa el inoxidable operador Enrique Nosigilia- hasta que la candidata sea María Eugenia Vidal, con un vice radical. En algo parecen estar de acuerdo: nadie cree que Macri sea el mejor candidato para Cambiemos.


En lo que respecta a la campaña de Jujuy, Morales se aseguró que el presidente no visite la provincia antes del 9 de junio y procuró emplear un discurso focalizado en lo local. No hay referencias a temas nacionales y hasta el vicegobernador Carlos Haquim se fotografió con Roberto Lavagna y negó su pertenencia a Cambiemos. No vaya a ser cosa que los vientos cambien en octubre y se necesite más que nunca de la “pata peronista”.


Editorial
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