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Morales imitó a Macri y cambió su postura

Luego del resultado de las elecciones, el gobernador Gerardo Morales había sido una de las voces más radicalizadas de Cambiemos, llegando a señalar que el objetivo era “luchar hasta el final para que no vuelva el kirchnerismo”. Sin embargo, con el correr de los días, y luego de varias charlas con distintos miembros de la UCR, buscó moderar su discurso, a tono con la nueva postura de Macri.


“El presidente entendió el mensaje de las urnas y hoy emitió un nuevo mensaje, diferente al del lunes que estuvo mal y lo reconoció”, declaró, alejándose de sus palabras del día lunes, cuando afirmó que la polémica conferencia de prensa de Macri el día después le había parecido buena.


En línea con la nueva estrategia, Morales rechazó las acusaciones de fraude que hizo públicas Carrió, aclarando que la responsabilidad del control de los comicios “estaba en manos de nuestro Gobierno”. Y no recurrió a eufemismo al referirse al resultado: "cuanto te pegan una paliza es por algo y lo del domingo fue una paliza”.


Morales se alineó así con la postura del Radicalismo a nivel nacional. Según trascendió, el cambio de estrategia de Macri tuvo que ver con el pedido de muchos aliados del Gobierno Nacional, entre ellos la UCR, que a través de Cornejo y Negri persuadieron al presidente de revisar la manera de encarar la crisis.


Para muchos correligionarios del gobernador, la elección de octubre ya está perdida y el objetivo es “apuntalar a nuestros candidatos propios en todas las provincias, intendentes y legisladores que han sufrido el castigo a Cambiemos”. Morales se negó a hablar públicamente de transición y sostuvo que “Macri puede ganar la elección”, aunque reconoció que “Alberto Fernández tiene más chances”.


Editorial
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