Matías Domínguez opinó sobre la Ley de Emergencia Alimentaria y su tratamiento en Jujuy
“La Ley de Emergencia Alimentaria que aprobó recientemente el Congreso de la Nación y que se niega a tratar en Jujuy el gobierno local a través de sus diputados, es una herramienta que piden a gritos los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, que sufren la desazón y el hambre de las políticas económicas y sociales que han provocado un aumento desenfrenado en los precios de los alimentos básicos”. De esta manera, el concejal capitalino Matías Domínguez (PJ) dio su punto de vista respecto a esta situación crucial que vive gran parte de nuestra sociedad.
Al referirse a la emergencia alimentaria, manifestó que deviene de la grave crisis social y económica que atraviesa el país, donde las familias no tienen un plato de comida en la mesa. Recordó que la emergencia alimentaria fue aplicada por el Decreto 108/2002, que creó el programa alimentario destinado a la compra de alimentos para cubrir las necesidades básicas de la población con mayor vulnerabilidad social.
Sobre la norma sancionada por el Parlamento argentino, el edil justicialista explicó que “se trata de un instrumento que autoriza al Ejecutivo nacional a aumentar como mínimo el 50 por ciento de los créditos presupuestarios y destinar partidas a las provincias para atender la urgencia alimentaria”.
Siguiendo esta línea argumental, indicó que una vez transferidas las partidas, el gobierno provincial deberá garantizar la intangibilidad y el destino específico de esos fondos a los comedores y copa de leches, entre otras instituciones dedicadas a la labor social.
Asimismo Domínguez abrió un interrogante en cuanto al dinero que destinará el gobierno de la provincia a los comedores por cada persona beneficiaria del servicio, atendiendo que el aporte actual es de $6.85 por cada plato de comida que recibe cada chico en Jujuy, siendo esta una suma irrisoria en el contexto actual.
Por otro lado, advirtió sobre la pésima gestión entre la administración provincial y lo proveedores de los comedores. “La situación es delicada porque la cadena de pagos se ha visto entorpecida, porque muchos proveedores llevan entre tres y seis meses sin cobrar, haciendo que la situación sea insostenible por el cambio permanente de precios y la inflación imperante”, subrayó.
Luego, refirió que otro problema es la falta de información sobre la cantidad de comedores que existen en la provincia y la inexistencia de un registro. “En el caso de la capital jujeña la intendencia podría aportar información precisa sobre el número de instituciones que asisten con comida a los vecinos de la ciudad, porque esa será la única manera de eficientizar los recursos y garantizar que el beneficio llegue a quienes lo necesitan”, sintetizó.
“Apostamos a que se transparenten los datos y se trate urgente la angustiante situación de hambre que viven los jujeños, ya que el gobernador esquiva el problema tratando de taparlo con el Plan Jujuy Asiste y Reactiva, el cual ha demostrado que sirvió solamente para la campaña electoral del 9 de junio y fracaso en todo sentido”.
Por último, lamentó la falta de quórum que provocó el radicalismo en la Legislatura jujeña para no tratar la emergencia alimentaria. “Morales sigue sin dar a conocer cuánto dinero va a destinar a los comedores de la capital y la provincia para atender esta demanda social angustiante”, concluyó.